De mi relación de niñez con el bombo chinchinero.

En época de mi propia niñez recuerdo que muy de vez en cuando un sorprendente e inesperado sonido de organillo y tambores rompía violentamente la monotonía sonora del día a día de aquellos años. Siempre estaba esperando ese instante de la vida en que se la fusión entre ambos instrumentos se hacía perfecto, real, bello, cercano y a la vez placenteramente ensordecedor. Por alguna razón que aun no me explico, me escondía tras la reja de mi casa, sentado en el suelo mirando hacia la casa y no hacia la calle, a veces me daba vueltas y daba un vistazo al espectáculo por entre los fierros , a la vez soñaba que algún día podría colgarme uno de esos mismos bombos en la espalda y tocar como aquellos extraterrestres que a veces era posible ver en forma fugaz. Se terminaba el espectáculo y a esperar nuevamente, a veces durante años, para poder verlo nuevamente.

Hoy, luego de haber transcurrido unos 40 años y con la menor emoción que entrega con la facilidad de ver cuantas veces quiera estas presentaciones de Chinchineros una y otra vez en losen internet y en la propia calle, puedo decir que estoy cumpliendo en gran parte este sueño, tal vez no siendo el músico ejecutante, sin embargo me siento parte del desarrollo y respeto por este hermoso instrumento con la misma motivación y ansiedad que sentía en la niñez. Hoy me he iniciado fabricante de un “bombo chinchinero”.

Introducción

Desde el punto de vista de la forma de transporte y uso del instrumento, es instrumento de la familia de los “terciados”, ya que se utiliza y ejecuta afirmado en el propio cuerpo del músico , en este caso la espalda, por medio de dos correas de hombro.

El bombo chinchinero es utilizado tradicionalmente para tocar y bailar al ritmo del organillo, existe también la práctica del llamado “bombo solo” que es un espectáculo más performático donde los chinchineros ejecutan una rutina de baile y percusión en ambos casos, el momento más esperado y característico es cuando el ejecutante gira a toda velocidad sobre sí mismo.

Ya en la década del 2000 aparece el “chinchinero de carnaval”, desde una comparsa que toma el instrumento desmarcado del personaje típico y lo transforma en el “bombo y corazón” de una banda de bronces de carnaval santiaguino. A partir de esto, el instrumento se abre pequeños espacios en algunos formatos folklóricos, siempre fuertemente ligado a lo escénico y performático. Y en menor medida en algunos ensambles más cercanos al mundo docto y del jazz que exploran la dimensión instrumental y timbristica del chinchin.

Esta amplitud en su utilización nos hace pensar diversas características propias del contexto en que se utiliza cada chinchin: en la forma tradicional, la coreografía del chinchinero es corta y el peso del bombo es importante para acompañar el baile y darle velocidad al giro, mientras que en la comparsa de pasacalle el bombista carga el bombo en su espalda por horas necesitando un instrumento liviano. Por otro lado, al empezar a ensamblar el chinchin con otros instrumentos armónicos y melódicos, empieza también la necesidad de buscar afinaciones más precisas y sonidos un poco más controlados.

Un par de varillas para bombo chinchinero consta de una varilla maceta y una varilla, la varilla maceta es un poco más gruesa que la varilla, tiene una terminación de material esponjoso en el extremo del golpe y es utilizada principalmente para obtener los tonos graves, la varilla en cambio es un poco más delgada y es completamente de madera, cumple la función de repique (a la varilla también se le llama redoble). En un principio se sabe que el ejecutante de bombo chinchinero utilizaba tan solo una maceta para tocar el instrumento, situación que cambió posteriormente a partir de uno de los cultores quién empezó a percutir el otro parche con una maceta al revés. En general estas varillas son de mimbre, es decir flexibles, duras y livianas a la vez, miden aproximadamente lo que mide el brazo extendido del músico y su diámetro aproximado en la empuñadura es de 15mm y va disminuyendo hacia el extremo del golpe.

(Algunas consideraciones técnicas para su correcta elección)

Este elemento se fabrica a partir de una técnica de moldeado y prensado de una sucesión de capas (pliegues, chapas y hojas) de madera, de diferentes grosores pegadas entre si formando un entramado cruzado de la dirección de sus vetas naturales, a fin de lograr mayor firmeza en el resultado final. En lo posible la idea es lograr un cilindro lo mas delgado posible una vez cumplida sus características de resistencia, esta característica irá restando peso al peso final del instrumento, es decir un cuerpo lo mas liviano posible. La medida mas utilizada para un bombo chinchinero es 20 pulgadas (20”) y su profundidad o altura en general es entre 8 y 10 pulgadas, esta ultima medida no puede ser igual a un bombo tradicional de una batería por lo cual el manejo del aire y su resonancia en ese sentido están un tanto limitadas. Se instalen además anillos de refuerzo interno en los bordes del cilindro con el fin de evitar deformaciones. En relación a los bordes y sus ángulos para proyectar hacia el interior el aire luego del golpe en el parche, se trabaja al igual que un tambor o bombo de batería, es decir, en 45° como el standard, pudiendo ser de mayor o menor inclinación dependiendo del detalle del proyecto.

Esta pieza es de madera solida y es fabricada y mecanizada en torno, tal cual lo indica su nombre tiene forma de una copa, tiene un agujero en el medio que va de extremo a extremo de ella, en cada uno de los extremos o salidas de la copa existe un refuerzo de pvc que aísla la pieza que para por ella. La copa se instala atornillada sobre el bombo y su función es sostener el platillo pasivo de choque el cual esta orientado hacia arriba y su campana descansa sobre la copa. Esta copa es atornillada desde el interior del bombo y tiene un complemento en ese mismo sector llamado contra copa que es un material de metal, de plástico o incluso de madera que actúa como soporte y refuerzo de la misma. Por entre el bombo y su agüero central deberá y moverse y pasar el vástago que sostiene tanto el platillo de choque superior por arriba, como la argolla y correa del tirapié por abajo.

Mientras el instrumento es ejecutado, este sistema se mueve dentro de la copa hacia arriba y hacia abajo, dicho movimiento genera ruido por roce el cual es amplificado aun mas por efecto de la caja de resonancia misma que es en este caso el bombo. Se han instalado 2 salidas de pvc en los extremos del agujero central de la copa, de manera que el roce sea mínimo y contra un material menos ruidoso que la propia madera, se recomienda que el vástago sea engrasado con grasa para engranajes de plástico con el fin de minimizar aun mas el ruido indeseable por el funcionamiento del mecanismo.

Este elemento e compone de una barra metálica redonda (vástago), en uno de sus extremos tiene soldada una argolla y en el otro, unos 80mm de hilo. EN el extremo de la argolla, se fija pegada y remachada una correa de cuerdo de vaca al alumbre que es sacada por un agujero del cuerpo del bombo hacia el exterior, lugar donde es enganchada al pie del músico por medio de un mosquetón. En la parte superior de esta barra se encuentra un sistema de sujeción del platillo superior y la contención de un resorte que limita la juntura de los platillos de choque, terminado en un hilo con tuerca de mariposa. Es importante mencionar que el cuero utilizado para tirar todo el sistema hacia abajo debe ser lo más rígido posible, tanto elasticidad como las fijaciones de argollas , medias lunas, etc, es preferible evitarlas ya que es necesario conseguir una respuesta casi inmediata al mover el sistema con el pie.

Chinchinera Olga Carrasco

En noviembre del año 2017 conocí a la ejecutante-aprendiz de bombo chinchinero Olga Carrasco. Yo había colgado una publicación en uno de los grupos de Facebook, con el fin de contactar a alguien relacionado al instrumento, para que me ayudara con el levantamiento e información práctica relacionada, al revisar algunos registros de presentaciones de Olga me di cuenta que ella participaba en proyectos y agrupaciones distintas a lo normal para este instrumento, en los cuales integraba el bombo chinchinero, lo cual me llamo mucho la atención, así que hablamos y llegamos a un acuerdo de colaboración mutua.